Las mujeres que ha formado este año la peña 'La Geta' han sido las verdaderas protagonistas de las fiestas de San Juan, ya que con su trabajo y buena visión han demostrado que saben elegir toros de empaque y élite para los festejos caurienses.
Orgullosa puede sentirse la 'engetá' Ana Isabel Juan González de su equipo de colaboradoras, porque han sabido elegir, tal vez, al toro de más juego de estas singulares fiestas de San Juan.
Y eso que las fiestas se han caracterizado por un abanico de morlacos de gran altura y donde la abanderada Almudena Domingo Pirrongelli, y los demás abanderados de las peñas que aportan astados a las fiestas, se han esmerado y han trabajado sin descanso para traer a Coria unos animales de gran enjundia y que han demostrado, una vez más, que en la localidad cacereña se dan cita bellos ejemplares con gran presencia y trapío que muchas plazas de primera categoría quisieran tener.
El telón de los sanjuanes 2012 se bajó con el encierro y lidia del toro 'Ruiaguas' de la ganadería cauriense Jara del Retamar de Fernando Estévez. El morlaco en el encierro dio muestras de su bravura advirtiendo a los mozos que venía a por todas con intención de dejar muy alto el pabellón de los 'sanjuanes'. Y así fue. En la plaza y antes de entrar en los toriles cogió junto a los barrotes a un vecino de Coria cuyas iniciales son J.P.L.
Dos cornadas
Tras ser volteado sufrió dos cornadas, una en el tercio medio del muslo derecho con dos trayectorias y otra en la cara externa del tercio superior del muslo derecho con trayectoria descendente. Tras ser asistido en la enfermería fija, fue trasladado al hospital 'Ciudad de Coria' para ser intervenido, siendo su pronóstico reservado.
Por la tarde tuvo lugar la lidia en la plaza y en las calles del toro 'Ruiaguas'. Una lidia que será recordada por mucho tiempo por los aficionados. El astado dio todo un recital en la plaza, con frenéticas carreras persiguiendo a los mozos sin tregua, entregándose en todo momento y rematando en los barrotes con rabia.
Fue un animal con pocos kilos en los costillares y con todas las cualidades morfológicas para triunfar en las fiestas de San Juan de Coria. Un toro además que mostró nobleza en todo momento, siendo cómodo para los recortadores y con mucha movilidad. Sumaba muchas virtudes este animal de capa berrenda negra siendo de los que hacen grandes estos singulares festejos.
El toro salió con mucha fuerza a la plaza rematando con bravura en los barrotes y avisando a los corredores de que venía con ganas. En una de sus primeras aladas carreras dio el primer aviso a un mozo sobre las ocho y cuarto de la tarde en los barrotes del Exprés. El animal empitonó a un hombre de 61 años natural de Hellín (Albacete) y cuyas iniciales son R.G.V.
Según el parte médico «entró en la enfermería fija a las ocho y cuarto, presentando cornada en costado izquierdo con afectación a la piel y tejido celular sin penetrar en tórax, no descartándose lesión ósea. Fue trasladado al hospital Ciudad de Coria con constantes normales, siendo el pronóstico reservado».
La lidia transcurrió sin que el toro bajase la guardia en ningún momento, acudiendo sin tregua a la llamada de los mozos , y a pesar de la constante brega, no abrió la boca saliendo íntegro de la plaza a su recorrido por las calles del recinto amurallado.
A la tercera campanada, salió con velocidad por la calle de las Monjas en dirección a la plaza de San Pedro, volviendo a la plaza y saliendo hacia la Catedral donde estableció su particular sede durante un tramo de la lidia. Posteriormente el toro se marchó a las Cuatro Calles donde se tomó un respiro en la portona de la ciudad, emprendiendo su camino por la calle de los Paños hacia la plaza de la Cava.
El astado regresó por el mismo itinerario hacia la plaza de la Catedral y pasadas las diez de la noche, Felipe Moreno Fonseca, acabó con él dando por finalizadas las fiestas del toro de San Juan 2012.
La peña 'La Geta' y en particular Ana Isabel Juan González, 'engetá de la agrupación', pueden sentirse orgullosos porque han sabido elegir un toro de los que marcan un hito en la historia de los 'sanjuanes' de Coria, unas fiestas que no decaen y que cada año se superan con morlacos de solera.
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